viernes, 15 de noviembre de 2013

MESA DULCE EN MORADO



La semana pasada fue mi cumpleaños y lo celebré en casa con una cena tipo buffet y una mesa dulce llenita de cosas ricas para mis invitados.




Tenía idea de hacer una mesa sofisticada y elegante y se me ocurrió hacerla en tonos morados. Esto tiene su por qué. Para empezar el morado es un color que me encanta, debe de ser que se me pega de mi hija que además del rosa le vuelve loca el "purple" y que he podido aprovechar estos manteles de organza tan bonitos que les estamos sacando un partido estupendo puesto que no es la primera vez que los ponemos en una mesa. 



El morado lo combiné con color plata, espejo y cristal con el fin de darle el toque sofisticado que andaba buscando. Los candelabros eran de cristal y plata, así como las tazas que utilicé con velas de te. La decoración de la mesa la completaba una cadena de cuentas de cristal y varias rosas de color morado.

Mas morado lo encontramos en mucho de lo dulce que hice, como estos brownies con fondant y lilas cristalizadas.

  
o gelatina de uva, auténtica "grape jelly" americana que estaba de vicio


unos pops de marsh mallow bañados en chocolate morado que mejor no os cuento como estaban porque salís derechitos a la cocina a prepararlos, mira se me está ocurriendo que es buena idea para tener cuando invitais a alguien a casa a una sesión de peli y palomitas, a que sí?


Qué mas preparé? Hice una receta de masa de galletas de mantequilla y la dividí en tres partes, una de ella para mezclar con un poquito de sal y rellenar con crema de chocolate, la forma que les dí era de pequeñas galletitas redondas con puntitos como las que venden en el super para acompañar con el queso que son saladas, sabéis?, otra parte con la mezclé con ralladura de limón y las rellené con crema de mantequilla de limón y las decoré con papel de azúcar de cebra y por último hice unas casitas de galleta de jengibre que las puse en unos vasos redondos para que asemejaran bolas de nieve, una monada!!!




y tres tartas, una de limón y merengue, otra de cholate y oreos y un bavaroise de chocolate blanco



y por último, lo mejor


Prometo que sin duda era lo mejor de la noche, me dejaron asombrada de lo buennnnniiiiiiimas que estaban estas paulovas, la próxima entrada la dedicaré este postre para que aprendáis a hacerlo porque de verdad que merece la pena.




Chic@s, disfrute muchísimo haciendo esta mesa, estaba todo delicioso y quedó muy bonito


Espero que os haya encantado.

Victoria

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